Sobre mí
Desde bien pequeña me he dejado guiar por el interés de comprender mejor la vida que todos transitamos. He ido en búsqueda de conversaciones profundas, de la chispa que se crea cuando dos personas comparten su mundo interior o del subidón que te da cuando consigues aliviar el malestar de alguien con tus palabras. Sin ser consciente, siempre buscaba las mismas sensaciones: conexión, intimidad, confianza, introspección, compasión.
Siguiendo esta pasión me formé en psicología clínica. Hoy tengo la suerte de poder acompañar a las personas en sus dificultades y alegrías, y de ser testigo de la fuerza que tenemos todos, incluso cuando pensamos que ya lo hemos dado todo o que no sabemos por donde tirar. Tras mis años de formación he comprendido que todos merecemos profesionales que atiendan desde el interés genuino, ofreciendo una mirada completa y amable para poder personalizar el tratamiento lo máximo posible.
Además, movida por mi vocación por el origen de la vida, la maternidad y la no-maternidad, he seguido formándome en salud mental perinatal. Considero muy importante ofrecer una atención libre de juicios y llena de validación y empoderamiento. Desde un enfoque ecosistémico, propongo una interpretación global de la situación, entendiendo que la vivencia perinatal está profundamente influida por factores biológicos, psicológicos, sociales y culturales que se entrelazan y configuran la experiencia única de cada persona.